Mi pequena princesa

Mi vida vagabvndea, sin un sentido por el qve el levanltarme sea algo util. Un sentido sin un fin. Vida absurda, sentimiento no muy cuerdo. Dejo que el tiempo pase, lento pero hacia adelante. Cuando nada importa, y el colectivo difruta, pues yo me encierro. Que es lo que quieres, soy persona, pero no hipocrita. No ves que el sol mañana saldra por el mismo lugar?
Aunque no por mucho tiempo, antes de caer y no levantarme, en el instituto conoci cierta persona. Y empezo a alegtarme, mujer de alma buena me sorprende. De sonrisas no faltaron por su parte, y yo arisco, estupido.  Muriendome en el infierno. Resplandeciente de las nuves vino a reogerme del subsuelo. Me ayudo a despertar del mal sueno. Cogiendome la mano, llenandome de besos y abrzos. Los dos juntos caminando hacia el cambio. Iluso de creer en el vacio.  Los tiempos pasavan como estrellas, fugaces. Horas en minutos, minutos a segundos, y mi cabeza en su amor. Construire un castillo de arena en las nuves, buscare un ricon en la tierra y prepare un paraiso. Quiero alzarte a lo mas alto de la cumbre. Y devolverle otra vida como ella hizo. No dejar de ser un buen hombre, y vivir los dos juntos en nuestro pisito. Hombre, dulce mujer, y nuestro hijo.
Aprendi de ti las caricias, a ver el amanecer desde otro punto de vista, en optimismo mi cabezota pesimista, a que a veces enganan las apariencias, y a q este mundo q nos rodea hace gracia, a transformar objetos en importantes posesiones. Nina de mis ensonaciones. Sentados en la luna contemplamos las estrellas,  a lo lejos jugamos con los planetas como canicas, ilusiones hechas realidad, pues infinitas, hacer de la via lactea como los dioses hicieron historias. Escucha bien esto princesa. Coge mi vidita, dale la vuelta, azle un nudo, pincha en el corazoncito con agujas, porq hagas lo q hagas te quiero, eres lo q mas me importa. Tu mi querida, flor q envellecio el jardin de malas hiervas.
Como en el arca de noe, metere lo que mas quieras, un planeta y a cultivar lo qve nos de la gana,

Para mi Reina

La reina

Yo te he nombrado reina.

Hay más altas que tú, más altas.

Hay más puras que tú, más puras.

Hay más bellas que tú, hay más bellas.

Pero tú eres la reina.

Cuando vas por las calles

nadie te reconoce.

Nadie ve tu corona de cristal, nadie mira

la alfombra de oro rojo que pisas donde pasas

la alfombra que no existe.

Y cuando asomas

suenan todos los ríos

en mi cuerpo, sacuden

el cielo las campanas,

y un himno llena el mundo.

Sólo tú y yo

sólo tú y yo, amor mío,

lo escuchamos.

Pablo Neruda

Mi Petita

Las olas del mar se escurren entre el cielo en su infinitud.

Las arboles se tambalean como temblorosos, sientiendo en su corteza el viento golpeando suabemente.

En la tierra virgen brota una semilla.

Así es como siento la vida estando con ella. Un cumulo de sensaciones, que una tras otra experimento con dulzura. Es ella la que logra los instantes tan bellos. Ella es la culpable de crear los momentos que no lograré olvidar jamás. Ya sin mas, condenado al sufrimiento de su dulzura, atormentando los sentidos en su mayor esplendor, como antes no huviese ocurrido.
De que sirve un atardecer, si no hay con quien sentir esa ternura insaciable que penetra por los ojos. De que sirve escuchar el silencio, si no hay con quien compartir la maestría del mismo sigilo de la caricia.
De que serviría vivir la vida que tengo, si no es para regalarsela a quien mas quiero.

De la tierra virgen nace una flor, nace nuestro amor. Que regamos con cariño cada uno de los dias.

Te quiero mi Petita